Anunciando las ganadoras de la séptima edición del Premio de Videocreación

Con los títulos Como una máquina de coser en un campo de trigo (provisional) y Palacio de Viento, respectivamente, los proyectos de Sallarès y Coderch se estrenarán en el contexto del Festival LOOP 2021, entre el 9 y el 22 de noviembre.

Como una máquina de coser en un campo de trigo, es el título provisional para una película a medio camino entre el documental, el ensayo, la ficción especulativa y el cine experimental. Una frase del fascinante psiquiatra catalán Francesc Tosquelles a partir de una de las afirmaciones más conocidas del manifiesto surrealista, la célebre fórmula de Lautréamont: «bello como un encuentro fortuito de un paraguas y de una máquina de coser sobre una mesa de disección». Sin saber si el error en la cita fue querido, y siendo todavía alguien poco conocido para nosotros, lo que sí sabemos es que Tosquelles fue un médico que en tiempos críticos de nuestra historia reciente revolucionó y politizó la psiquiatría, trabajó con la precariedad y el inesperado, utilizó el cine y las artes, se abrió a la experimentación, a la insistencia del inconsciente y a la mirada sobre el cuerpo que reivindicaron las vanguardias. Esta complicidad de Tosquelles con el arte, la política, la crisis, el pensamiento insurrecto y la imagen en movimiento, es el origen de este proyecto fílmico que quiere reconstruir un legado olvidado para Cataluña y el mundo, y abrir un espacio crítico (y autocrítico) sobre su desmemoria, utilizando el lenguaje cinematográfico como el espacio de narración idóneo para ello, con la voluntad de hacer un film tan radical en contenidos y forma como lo fue la vida y la obra de Francisco Tosquelles.

Palacio de viento es un proyecto videográfico que adopta las formas de la tragedia clásica, excepto que aquí no hay héroe, la narrativa parece suspendida en el tiempo, sin desenlace y sin lección moral, y el corazón, que tradicionalmente ejerce de guía y de intermediario, está formado ahora por personajes dudosos, híbridos nacidos de una revisión de la figura de la sirena mitológica: voces que representan al mismo tiempo el conocimiento, la atracción y el peligro, parte mujer, parte animal y parte máquina. El proyecto está estructurado en nueve cápsulas que pueden funcionar de manera independiente entre sí, pero que juntas forman un ciclo completo. Se presenta aquí la parte central de la obra, compuesta por cinco episodios con sus correspondientes estásimos, las partes cantadas del corazón, intercaladas entre los episodios. Lejos de tratar grandes gestas épicas, Palacio de viento es una exploración de la cuestión de la desorientación, la desintegración y reintegración de los relatos que conforman nuestras vidas.