Alta Fidelidad

¿Qué fue antes: la música pop o el Pop Art?  ¿el Arte Conceptual o los discos conceptuales? ¿el Expresionismo Abstracto o el Free Jazz? ¿el minimalismo escultórico o el musical? ¿el Punk o los “Nuevos Salvajes”? ¿los Young British Artists o el Brit Pop?.

Las interferencias entre las artes visuales y la música popular a lo largo del siglo XX han sido muy fecundas y son ya varias las generaciones de artistas que han integrado en los procesos de producción de sus obras elementos que se relacionan de modo directo o indirecto con las actitudes e imaginarios desarrollados por géneros como el jazz, el rock and roll, el pop, la psicodelia, el glam, el punk, el soul, la música disco, el hip-hop, el indie pop, la electrónica o cualquiera de los subgéneros y tendencias musicales más fugaces desarrollados en los últimos cincuenta años

El Pop y el Rock no son sólo música, son también “imagen” y antes de la aparición del videoclip en la década de los 80 o de plataformas como Youtube en el siglo XXI, tal imagen tuvo su más perfecta encarnación (aparte de la propia apariencia de los artistas) en las fundas de cartón que envolvían los discos de vinilo de 7”,  10” y 12”.

La superficie de aquellas carpetas de cartón de 31 x 31 cm pasó a convertirse en manos de muchos artistas en un simbólico lienzo en blanco a la espera de ser llenado de significados, y en un estimulante campo de experimentación plástica que no ha dejado de sorprendernos. “Música para los ojos” que en la actualidad ha adquirido un carácter mítico para las generaciones más jóvenes e histórico para las más veteranas.

Alta Fidelidad reúne cientos de portadas de discos que demuestran que en muchas ocasiones las tendencias artísticas más significativas de la segunda mitad del siglo XX avanzaron de la mano de tendencias musicales estéticamente equiparables.

El espectador puede echar en falta algunas portadas de discos míticas de bandas como Beatles, Rolling Stones, Pink Floyd, Led Zeppelin, Sex Pistols, Joy Division, The Smiths o U2 (entre un largo etcétera) que en esta ocasión hemos decidido dejar fuera de la exposición, por haber sido realizadas por diseñadores gráficos -asociados casi siempre a los sellos discográficos-, pues aquí queremos poner énfasis en las portadas creadas por artistas plásticos que -a priori- trabajan de un modo más libre frente a las imposiciones de la industria musical.

Con esta premisa; Alta Fidelidad reúne carpetas de discos con imágenes diseñadas (o cedidas expresamente) por más de un centenar de artistas plásticos relevantes; y se divide en diversas secciones que abarcan desde estilos de las vanguardias históricas como el Cubismo, Dadaísmo, el Surrealismo o el Expresionismo Abstracto, pasando por movimientos como Fluxus, el Nouveau Réalisme, el Minimalismo, el Pop Art, el arte feminista, o el Arte Conceptual, sin olvidar tendencias artísticas recientes como  el movimiento Young British Art, la Estética Relacional o las teorías de la Postproducción.

Además, los visitantes tendrán la oportunidad de escuchar una amplia selección musical de la muestra a través de un sistema de listas de Spotify específicamente confeccionado para la ocasión.