En 1989 se licencia en Bellas Artes, en la especialidad de imagen, en la Universidad de Barcelona. Recién acabada la carrera gana en dos ocasiones y de forma consecutiva la Bienal de Barcelona: en el ámbito de vídeo (1989) con «Autorretrato» y en el ámbito de fotografía (1991) con la primera serie «somatranslúcido». Realiza su primera exposición individual a principios de 1991 en el Casal Balaguer de Palma. El cuerpo es una de las constantes en su obra: como frontera, en las sucesivas series fotográficas de «somatranslúcido»; videográficamente, en «Autorretrato» y su juego de espejos; en la colaboración de escritor durmiente en «El niño larva»; confrontando los rastros humanos de los turistas con los residentes, en «Residents & visitors», y en el propio vídeo que se presenta en esta edición. La otra constante es el cuestionamiento del tiempo. Traducido en la manipulación de tomas fotográficas individuales que comprenden desde imágenes con larga exposición a instantáneas y que acaban como frames de una secuencia de vídeo donde el tiempo vuelve a ser alterado.