Nacido en Dublín en 1969, Eamonn estudió pintura y posteriormente fotografía en el Dun Laoghaire College of Art & Design (1987-1991). Al terminar la universidad, se puso a viajar por todo el planeta, pensando en convertirse en un «fotógrafo del mundo». No tardó en regresar a Irlanda y se mudó al número 147 de Parnell Street, Dublín 1, un edificio que había albergado el negocio familiar. El edificio se convirtió en un complejo de estudios para artistas, cineastas y fotógrafos. Mientras trataban de poner en marcha un plan para hacer una película, compraron un equipo de sonido con el que instalaron un estudio de grabación en el sótano del edificio. Allí empezaron a grabar a grupos locales y en poco tiempo Eamonn lanzó su primer sello discográfico, Dead Elvis. Con su permanente pasión por la música, un estudio de grabación operativo en el edificio y las posibilidades que ofrecían las nuevas tecnologías, Eamonn pronto empezó a ampliar sus intereses hacia la música electrónica. En 1994 fundó D1 Recordings, un sello discográfico muy influyente que se convirtió en el motor de todo lo que vino después.
Eamonn había conocido al diseñador y artista Niall Sweeney en la universidad, y gracias a D1 Recordings iniciaron una prolongada colaboración, primero en los diseños para el sello y en los eventos y festivales relacionados con él, y posteriormente, y de modo más estrecho, en publicaciones, exposiciones y películas. Durante los veinte años siguientes D1 grabó y publicó música electrónica de muchos artistas nacionales e internacionales, lo que llevó a Eamonn a viajar de nuevo por todo el mundo, esta vez con discos de vinilo entre las manos en lugar de una cámara. Conoció al compositor y músico David Donohoe cuando este se convirtió en uno de los artistas del sello, forjando una relación que ha dado lugar a numerosas colaboraciones musicales. Juntos, produjeron String Machine, 2008-2013, un proyecto en el que, mediante una serie de actuaciones en directo, exploraban las tradiciones y las prácticas musicales tanto acústicas como digitales. En 2002, Eamonn fundó DEAF, el Festival de Artes Electrónicas de Dublín, que tuvo un gran éxito y se prolongó hasta 2009.
Más o menos en esa época, Eamonn empezó de nuevo a hacer fotografías en las calles de su barrio, en la misma puerta de su casa en Dublín. Su interés por la literatura, en particular por Samuel Beckett, los movimientos culturales y la política social de nuestro tiempo, todo ello pareció confluir con su experiencia en el mundo de la música para manifestarse en las calles de Dublín a través de sus fotografías. En 2014 autoeditó i a través de D1, el primero libro de la «trilogía de Dublín». Cuando Martin Parr hizo su famosa afirmación de que era «el mejor libro de fotografía de calle que había visto en una década», todo se aceleró. Ese mismo año, Eamonn se incorporó a la Michael Hoppen Gallery de Londres como uno de sus artistas. A ese libro le siguió un año después ON, que cosechó un éxito similar. Poco después llegó la invitación a exponer en los Rencontres d’Arles 2016, que dio como resultado la instalación inmersiva y el libro End., para el que David compuso un conjunto de piezas musicales interconectadas. La exposición y el libro de End. fueron el primer proyecto de colaboración integral a gran escala entre Eamonn, Niall y David, un modelo de cooperación y amistad que continúa hasta el presente.
Entonces llegaron el reconocimiento internacional, el coleccionismo y las exposiciones. En 2017, mientras Eamonn planeaba un nuevo trabajo a partir de las ideas surgidas de su interés en las películas del proyecto Atlantean de Bob Quinn de los años ochenta, su madre murió. Esto desencadenó una serie de acontecimientos que dieron lugar a K, 2018, un nuevo trabajo y una publicación con fotografías hechas en la costa oeste de Irlanda y acompañados por una composición de David basada en las canciones tradicionales irlandesas de lamento. Por esa misma época, Fundación MAPFRE le cursó una invitación para exponer en Madrid en 2019. Todo ello acabó conectando las líneas de pensamiento e investigación que habían dado lugar a K, llevando a Eamonn a viajar a Extremadura para fotografiar la serie española en 2018. Fue también en 2018 cuando tanto ThisIsPopBaby como Thames & Hudson le encargaron simultáneamente la instalación cinematográfica en nueve pantallas y el libro Made In Dublin, gracias a los cuales el escritor irlandés Kevin Barry se convirtió en el cuarto colaborador. Made In Dublin se presentó en Photo London 2019.
Última actualización 22 de octubre 2020