Dorith Galuz y su marido son coleccionistas desde los años noventa. Han formado su colección, que incluye vídeo y medios digitales, escuchando creaciones emergentes y estableciendo un diálogo con artistas jóvenes y emergentes. Creada en los años 90, su colección ha evolucionado para reflejar su formación en psicoanálisis a través de un interés por los encuentros humanos, la comunicación y la ficción, más recientemente dentro de las prácticas de vídeo y digitales.