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HD, Single-Channel Video, Colour, Sound
En 1912 se construyó la primera central hidroeléctrica de Cataluña en el Pirineo catalán. Debido a los múltiples accidentes laborales que sufrían los trabajadores, la empresa instaló un hospital de campaña con una estructura de madera y paredes de cartón-fieltro. En 2019, Bunga decidió visitar las ruinas del lugar y se reencontró con todo lo que caracteriza a su praxis artística: la idea de ruina, la ausencia, las capas pictóricas superpuestas, las texturas correspondientes a sus diferentes usos, la fuerza de la naturaleza, la arquitectura como tercera piel, la autoconstrucción y la organicidad de los materiales. Esto lo llevó a documentar las ruinas con su teléfono. La postproducción coincidió con la pandemia del Covid-19, en el momento en que nuevos hospitales de campaña aparecían por todo el mundo, mientras el de cartón seguía derrumbándose en el bosque. Bunga añadió a la obra el sonido de su propia respiración: todo se transforma y se conecta, desde el primer suspiro hasta el último.