11/18

Producida a lo largo de siete años, 11/18 de Melanie Manchot consiste en una vídeo instalación de nueve canales compuesta de metraje editado obtenido tras filmar cada mes a la misma persona durante un minuto, registrando su expresión entre las edades de los once a los dieciocho años. Utilizando el formato restringido del retrato de estudio y filmando con película analógica de Super 8, la obra se convierte en una investigación sobre el tiempo, la duración y el compromiso. Explorando los límites entre el documental y la ficción, 11/18 se destaca como un estudio sobre la noción de subjetividad donde las partes que lo constituyen afloran como gestos o mimetismos. Los retratos emergen y se ocultan exponiendo los cambios que la modelo de Manchot ha ido experimentando a medida que su apariencia y su manera de relacionarse con la cámara cambia. La modelo de Manchot responde a la cámara de la misma manera que respondería a alguien familiar y a algo misterioso. De esta manera, 11/18 emerge como una búsqueda de la identidad y el carácter al tiempo que afirma su naturaleza mutable e inexplicable.